La televisión ha pasado de ser un medio simple de transmisión de contenidos a convertirse en una plataforma vibrante y dinámica, que abarca desde entretenimiento hasta información, con una variedad impresionante de géneros y formatos. Esta transformación no solo ha sido impulsada por la tecnología, sino también por el papel clave que juega la propiedad intelectual (PI) en proteger y promover las ideas, creaciones y negocios de la industria.
Sin estos mecanismos de protección y las recompensas que ofrece la propiedad intelectual, los creadores simplemente no habrían tenido el incentivo necesario para innovar y seguir empujando los límites de lo posible. Relevante notar que la propiedad intelectual no solo protege lo ya creado, sino que también actúa como un potente incentivo para la innovación. Al garantizar que las ideas originales estén protegidas, esta protección otorga a los creadores la confianza necesaria para experimentar, arriesgar y explorar nuevas formas de contar historias, teniendo con esto el incentivo necesario para innovar.
Lo anterior lo vemos en el ámbito nacional. La televisión dominicana ha experimentado una notable transformación en los últimos años, impulsada por este incentivo de protección que permite la innovación tecnológica y creativa. La transición hacia formatos digitales, la implementación de transmisiones en alta definición (HD) y la creciente integración de plataformas en línea han redefinido la manera en que los dominicanos consumen contenido audiovisual. Este auge innovador ha destacado la importancia de la propiedad intelectual, ya que la creación de producciones locales con historias auténticas y técnicas de grabación de vanguardia requiere una adecuada protección de derechos de autor y marcas registradas. Según datos de la Oficina Nacional de Derecho de Autor (ONDA), en el primer trimestre de 2023 se registraron 1,161 obras en formato físico, de las cuales el 84.4% correspondieron a obras literarias, 13.6% a obras artísticas y 2% a obras científicas.
Asegurar la titularidad de estas obras no solo fomenta la inversión en el sector, sino que también garantiza que los creadores puedan beneficiarse de su trabajo, evitando la piratería y promoviendo la exportación de contenidos que posicionan a la industria televisiva dominicana como un referente regional.
Es así como podemos ver cómo la creatividad y la innovación en la televisión se ha visto impulsada por la protección que solo otorga la propiedad intelectual. Sin la posibilidad de resguardar sus ideas y obtener recompensas por su trabajo, los creadores no habrían tenido el estímulo necesario para seguir innovando. Gracias a la propiedad intelectual, la televisión ha podido evolucionar, adaptarse a los nuevos tiempos y ofrecer contenidos cada vez más variados, innovadores y accesibles.
Sin duda, la propiedad intelectual seguirá siendo uno de los pilares fundamentales sobre los cuales se construyan las futuras innovaciones televisivas.
Autor:
Laura Pérez – [email protected]
Asociada Propiedad Intelectual y Nuevas Tecnologías
Ulises Cabrera
Fuentes: